El sensor roto que hundió las estadísticas de la National Portrait Gallery | Cultura

Un error de recuento encendió las alarmas de la National Portrait Gallery de Londres cuando la empresa Ipsos Retail Performance indicó en su último informe que los visitantes habían descendido más de un 40%. En realidad habían caído un 10% y el error, según indicó un portavoz del museo a The New York Times, se debió a un sensor defectuoso en la entrada principal. Las cifras preocuparon al Gobierno británico —la principal fuente de financiación de la galería— y afectaron a la reputación del museo.

La compañía, que lleva trabajando 17 años con la institución cultural, señaló el pasado miércoles en un comunicado que el incidente fue un caso aislado. Ipsos ha pedido una auditoría para los otros espacios públicos en los que trabaja contando a los visitantes.  

Según el falso recuento, el número de visitantes que visitaron la galería durante el año fiscal 2017-2018 cayó de 1,9 millones a 1,1 millones. Sin embargo, el número real de visitantes era de aproximadamente 1,7 millones, según informó el museo el pasado miércoles. Esto representa un descenso de un 10%, en contra del 40% recogido en el informe entregado al Parlamento británico. El documento también indicaba que los visitantes de abril a junio habían descendido un 28% en comparación al mismo periodo del año anterior. 

El fallo en uno de los sensores de la entrada principal, detectado en la primavera de 2017, había sido reparado por un ingeniero. Pero el dispositivo no pasó la prueba de funcionamiento en julio de 2017, aunque un empleado de Ipsos señaló que lo había pasado, según The Guardian.

El Museo nunca fue informado del error pero el pasado julio, notó que había una contradicción entre las cifras de Ipsos de la entrada principal y las cifras de otra ubicación. La empresa aseguró al museo que el sistema funcionaba. «El sistema de recuento de la entrada principal ha sido reemplazado y acciones para corregir el error han sido tomadas por Ipsos Retail Performance para que no se repita el incidente», señalo un portavoz de la galería a The Guardian.